El control de las manos agrietadas y voces rasgadas. Bufandas al cuello y pies bajo cero, escalofríos. Árticas miradas, frases cubiertas de vaho, con aliento a Starbucks a las 8 de la tarde del día tal del mes cuál, por las calles navideñas de...
Día en que me paro, pienso, digo y afirmo sin dudar que ardo a ratos y cuando lo hago, rompo tus glaciales oscuros que miran fijamente a los míos, calcinados.
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